Campaña Latinoamericana por el Derecho a la Educación

  • Increase font size
  • Default font size
  • Decrease font size
  • Contato

Site Map

Senado Federal de Brasil debate Plan Nacional de Educación: Campaña Nacional está movilizada y señala riesgos de retrocesos

Coalición y otros movimientos sociales por el derecho humano a la educación llaman la atención sobre el riesgo de que una modificación del texto del Plan que se presentó impida su monitoreo y posibilite que se destine parte del presupuesto de la educación al sector privado

Con informaciones de la Campaña Nacional y de la Agencia Brasil

Desde hace año y medio tramitándose en la Cámara de Diputados y mes y medio en el Senado, el Plano Nacional de Educación (PNE) de Brasil sigue sin ser aprobado al finalizar el período legislativo. En el Senado, se presentaron 80 enmiendas al Plan, pero por ahora se ha mantenido el artículo del proyecto que más generó polémicas en la Cámara de Diputados brasileña: el aumento del porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) que se invertirá en educación: 10% anual.

El PNE define 20 metas educativas que deben cumplirse en el plazo de diez años, entre las cuales, el aumento de la inversión en educación pública, ampliación del número de plazas en guarderías, erradicación del analfabetismo y oferta de la enseñanza en tiempo integral en al menos 50% de las escuelas públicas. Sin embargo, a la Campaña Nacional por el Derecho a la Educación de Brasil y a otros movimientos sociales enganchados en la lucha por el derecho humano a la educación les preocupa el debate sobre el proyecto de ley en el Senado debido a una propuesta de modificación del texto.

El dictamen que fue presentado por el relator del PNE en la Comisión de Asuntos Económicos del Senado, José Pimentel, contiene 35 enmiendas que, de una parte, corrigen errores de técnicas legislativas y adecuan el texto a lo que dispone la Convención sobre Derechos de las Personas con Deficiencia de la ONU/2006, pero de otra parte, según pronunciamiento de la Campaña Nacional, presenta retrocesos en algunos aspectos, por ejemplo, en la retirada de la meta intermediaria de inversiones del 7% del PIB en educación en el plazo de cinco anos. Según pronunciamiento de la Campaña Nacional, se trata de evitar el control social en la financiación de la educación. “Sin dispositivos intermediarios es prácticamente imposible realizar el monitoreo de las metas del nuevo PNE”, señala la declaración de la Campaña.

El diputado Pimentel también propone otra modificación al texto, substituyendo la vieja referencia de aplicación de esos recursos exclusivamente en la enseñanza pública, por un concepto más genérico: el de “inversión pública total en educación”.

“La idea del gobierno es retirar esa referencia a la educación pública, para que se pueda compartir la distribución de esos recursos con el sector privado. Es el retroceso más grande que identificamos. No vamos a permitir que eso suceda y trataremos de convencer a algunos senadores de que están equivocados”, aseveró el coordinador de la Campaña Nacional por el Derecho a la Educación, Daniel Cara, al sitio de noticias Agencia Brasil.

Vea pronunciamiento completo de la Campaña sobre estos retrocesos de la propuesta de modificación del Plan

El aumento del porcentaje de inversiones en educación, que se aprobó la Cámara de Diputados, es uno de los mayores logros de la sociedad civil en la lucha por el nuevo PNE hasta el momento. El proyecto del gobierno proponía pasar del 5,3% del PIB al 7% en diez años. Después de intensas negociaciones, se aprobó el 10% del PIB para la educación. El gobierno solicita que el Congreso indique una fuente de recursos para que se haga efectivo ese porcentaje e indica como principal alternativa el pago de los royalties del petróleo brasileño a los gobiernos. Esa asignación, sin embargo, depende de la aprobación del Congreso Nacional.

El análisis del Plan se retomará en 2013 y pasará por otras dos comisiones del Senado antes de su apreciación por el pleno. Después, el proyecto regresa a la Cámara para que se aprecien las modificaciones que los senadores probablemente presentarán al Plan. El último paso será la sanción presidencial.

El Ministro de Educación brasileño, Aloizio Mercadante, solicitó celeridad en la aprobación del PNE, que debía haberse implementado en 2011. Cara, coordinador de la Campaña Nacional, espera que el debate en el Senado sea un poco más ágil. “Los senadores siguieron la tramitación del PNE, los desafíos del Plan y sus polémicas. La tendencia ahora es que decidan deliberar de manera más rápida. Creo que tendremos el plan aprobado dentro de seis a nueve meses”, dijo a la Agencia Brasil.