"Entre nuestros desafíos educativos está responder de manera efectiva a la formación de los sectores excluidos"
En entrevista a la CLADE, la Secretaria Técnica de la Campaña Boliviana por el Derecho a la Educación (CBDE), Virginia Beatriz Pérez Sandoval, señala cuáles han sido los principales desafíos y logros en el camino hacia la realización del derecho humano a la educación en Bolivia, además de comentar las actividades realizadas por la coalición a lo largo del 2012. Lea, a continuación:
¿Cuáles son los mayores desafíos a la realización del derecho humano a la educación en Bolivia?
En Bolivia, estamos viviendo una etapa de edificación del Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional y, en este momento histórico, hay tensiones y ejercicios de poder donde se debaten las más variadas visiones de Estado.
Un tema de tensión en la agenda educativa pública se visibilizó en la interpelación a la visión antropocéntrica de la educación vinculada a un modelo educativo neoliberal, en contraposición al planteamiento de una educación que promueve el fortalecimiento de la identidad, la espiritualidad, el vivir en armonía con la Madre Tierra y en comunidad; el problema del argumento neoliberal, que se plantea en defensa de los intereses de mercado, es que ello se apropia en distintos momentos y de manera parcial de argumentos como por ejemplo el de que el hombre y la mujer son parte del cosmos y no el centro del universo y, con base en ese tipo de afirmación, intentan descalificar la perspectiva de derechos, que en ese discurso se transforma en una concepción ideológica que está vinculadas a procesos neoliberales.
Los debates de estas posiciones, profundizados en los espacios promovidos por la CBDE entre otros, se sustentan en los marcos legales existentes; en la nueva Constitución Política del Estado, que establece el compromiso de promover, proteger y respetar los derechos reconocidos por la Constitución como inviolables, universales, interdependientes, indivisibles y progresivos, además de reconocer los tratados y convenios internacionales, ratificados por Bolivia.
En el último tiempo, se puede advertir una posición más explícita respecto al Derecho a la Educación y ejercicio de éste, por parte de autoridades del sector. Efectivamente, este derecho se encuentra constitucionalizado y es parte de los derechos fundamentales en los que se alinea la Ley de Educación 070/2010; se puede decir que en términos de marcos legales para un efectivo ejercicio de este derecho existen avances significativos, el desafío está en complementarse con políticas públicas departamentales y municipales de otros sectores, como las laborales y de salud, desde una visión integral, con voluntad, decisión y financiamiento económico para responder a las reivindicaciones ante todo de sectores pobres y excluidos y quienes por diferentes situaciones no logran acceder a la educación.
En este momento, para lograr transformaciones efectivas la reglamentación de la política educativa es necesario que los planteamientos filosóficos en términos de bases, fines y objetivos, se pongan en práctica. Por ejemplo, la despatriarcalización, la descolonización, la igualdad y equidad de género, la educación para la no violencia, el desarrollo de idiomas originarios que deben ser incorporados en los niveles de concreción del Currículo Base del Sistema Educativo Plurinacional, el reglamento de la evaluación, de la participación social en educación y otros. Se busca afectar visiones tradicionales, profundizar en el nuevo paradigma educativo, superar la tendencia a la funcionalización e implementar propuestas metodológicas que garanticen procesos educativos que respondan a las necesidades individuales y sociales de las personas, de manera que el acceso a la educación pública garantice calidad.
En términos de desafíos no se puede dejar de mencionar la formación y el fortalecimiento integral de maestros y maestros en ejercicio y la formación inicial de docentes que contribuyan en la calidad educativa y superar la brecha que existe en el acceso entre el nivel primario y la culminación del nivel secundario, donde los esfuerzos de muchos de nuestros Estados, se quedan en el camino. Otro reto es responder de manera efectiva en la formación de sectores que presentan condiciones de exclusión, como las personas privadas de libertad por un lado y por otro, las personas con discapacidad.
Es vital la cuestión del financiamiento, incrementar el presupuesto no sólo en cuenta corriente, que por cierto es necesario en inversión de estudios, innovaciones metodológicas, experiencias y equipamiento de centros de laboratorios, ver que el financiamiento en educación provenga de fuentes sostenibles y sobre el tema, hace falta información y conocimiento de los presupuestos de los gobiernos departamentales y locales, de las prioridades que existen en la distribución y principalmente la ejecución y rendición de cuentas.
¿Cuáles fueron las principales actividades de movilización social e incidencia política, que la coalición ha desarrollado en los últimos tiempos?
Sin duda, la continuidad en el tratamiento de la educación de la primera infancia, el debate del tema entre las organizaciones e instituciones que son parte de la CBDE y autoridades educativas del área de educación inicial. Este proceso se inició con bastante compromiso en la Semana de acción Mundial en el 2012) y actualmente existen acciones coordinadas con la Red AINI que tiene como eje de acción la educación de la primera infancia, de tal manera que no sólo sea declarativa, sino pueda contar con presupuesto, propuestas, un acompañamiento y procesos de exigibilidad por parte de la sociedad civil.
El tema curricular; la socialización de su contenido y el análisis de los componentes que hacen a esta política, ha servido de base para plantear la necesidad de desarrollar un currículo despatriarcalizador, descolonizador y no sexista. Hay todavía un largo camino de sensibilización que recorrer. Asimismo, de por medio está la posición ética y política que adopten las autoridades de educación; en este tema el mayor logro es que la Ley 070/2010 plantea una educación despatriarcalizadora y con igualdad de género, esto significa que el sistema educativo es patriarcal y debe cambiar.
Otro proceso de movilización social donde está involucrada la CBDE, es la “Ley Integral para Garantizar a las Mujeres una Vida Libre de Violencia”, que ha sido analizada en la Asamblea Plurinacional y promulgada en marzo de 2013. Lo que más se puede destacar es el debate con autoridades en la construcción de esta política pública. La reglamentación sobre la educación sin violencia, de la misma manera, se ha convertido en un tema de prioridad, donde el gremio docente ha incidido en su modificación, mediada por una fuerte presión.
Respecto a la educación de personas privadas de libertad, se generó la movilización de sectores involucrados y la urgencia de coordinar con instancias de los ministerios de Gobierno y Educación. Las reflexiones y acciones desarrolladas por la CBDE han develado concepciones que orientan las experiencias educativas de los diferentes recintos carcelarios del país, al mismo tiempo de proyectar la necesidad de desarrollar un sistema educativo que responda a las actuales políticas; esto implica repensar las ofertas educativas que superen la visión de oficios que se tiene.
¿Qué logros alcanzó la sociedad civil hasta el momento respecto a la garantía del derecho humano a la educación en el país?
En términos de logros está la participación social organizada, de redes educativas, activistas, poblaciones indígenas, padres y madres, maestros y maestras de base que se traduce en acciones vinculadas a la construcción de propuestas y el desarrollo de diversas experiencias educativas en las que se asume la “educación como derecho humano”; principio que es parte del Vivir Bien, es decir de un proyecto histórico social alternativo que nos desafía hoy.
Los aportes a la política educativa actual, se puede decir que es otro de los logros alcanzados. Conviene recordar que la Ley de Educación incluye varios artículos propuestos desde la CBDE, por cierto construidos con amplia base social mediante un proceso de deliberación democrático y de negociación cultural permanente, apuntalado por estrategias metodológicas innovadoras. Este proceso ha significado por un lado posicionarse frente a la realidad y aportar con propuestas que comprometen dimensiones éticas y políticas y por otro lado se ha visto fortalecido el movimiento generado desde la CBDE.
También se destaca el aporte al desarrollo de otras políticas, como la Ley Integral para Garantizar a las Mujeres una Vida Libre de Violencia, la contribución en las Metas 2040 del Municipio de La Paz, El Reglamento de Participación Social, los aportes al Plan Nacional de Educación en Derechos Humanos y a la propuesta de Ley contra la Violencia en el Ámbito Educativo. Estas son acciones colectivas que responden a la promoción de derechos humanos y que pasan por ejercer el derecho a la educación y el enfoque de género en la política educativa, que tiene que ver con la despatriarcalización y la descolonización. Esto se debe a la acción sinérgica de organizaciones e instituciones de la sociedad civil. Sin embargo de esto, la tensión que se vive es la puesta en práctica de esta política, que pasa por un proceso profundo de generar conciencia social, cuestionar la realidad y cuestionarse uno/a mismo/a y aprender y desaprender de nuestras propias experiencias.
¿Cuál ha sido la importancia del trabajo desarrollado por el foro en el alcance a esos avances?
Desde el rol de liderazgo, la CBDE viene promoviendo un proceso de acompañamiento a las políticas educativas y de exigibilidad en el tratamiento de determinados temas; la identidad de red lograda es sustentada por las fortalezas que tienen cada una de las instituciones que forman parte de la Campaña.
La promoción y apertura de espacios de participación social como las mesas de trabajo, conversatorios, foros y diálogos, así como vídeo-debates, van renovando la dinámica de la deliberación, socialización y construcción de propuestas e internamente en la red se viene accionando un permanente cabildeo. La Campaña está presente en espacios de debate educativo y ámbitos de tratamiento y defensa de los derechos humanos.
Esta cultura de ciudadanía, de exigir derechos, nos compromete éticamente en ser sujetos sociales corresponsables en su ejercicio y constructores y constructoras de propuestas y acciones que coadyuven en las transformaciones, de las realidades educativas de hoy.
¿Cuáles estrategias y actividades del quehacer del foro te gustaría destacar y por qué?
La incidencia y el seguimiento que hacemos a la política pública tiene que ver con el momento – histórico social – que vivimos en el país, es un tiempo que privilegia la construcción de propuestas de políticas públicas, no solo para la educación, sino también para otros sectores. Pero lo más interesante es que junto con otras instituciones y organizaciones, venimos fortaleciendo capacidades de leer y entender la realidad con una mirada integral, se ha visto que la educación sea incluida en las políticas locales como en los planes de desarrollo de los gobiernos locales, que se incluya en sectores como salud, y en acciones de Viceministerios, como el de Descolonización. Por ejemplo no se puede remontar en problema de la violencia, la discriminación sino incluimos o consideramos la educación como derecho humano y base para enfrentar estos problemas.
Otra de las estrategias a destacar es la generación y difusión de conocimiento, en esto la sistematización y la investigación han contribuido bastante, porque consideramos que ambos elementos enriquecen la participación social. Los planteamientos y las propuestas tienen argumentos más contundentes, más sólidos, aportan al diálogo, pero además responden a un enfoque de derechos y en este sentido la exigibilidad adquiere fuerza.
Merece un tratamiento especial, en el quehacer de la Campaña, por un lado la sistematización desde la cual se ha venido construyendo propuestas, categorías de análisis, priorización de temas. Permanentemente, se está potenciando la capacidad de sistematizar debates, construir categorías de análisis, identificar contextos y textos, retroalimentar la línea de información y comunicación y las mesas de trabajo, elaborar materiales didácticos virtuales.
Por otro lado, está el fortalecimiento institucional que tiene que ver con las alianzas y adhesiones con que cuenta la Campaña, que por cierto, también vive un proceso de construcción singular, simultaneo al desarrollo de sus acciones, donde las y los aliados estratégicos son vitales para irradiar y ampliar sus perspectivas de manera sinérgica.
Actualmente, si bien a nivel nacional se interactúa con la coalición través de la información difundida, contamos con referentes institucionales en La Paz, Sucre, Potosí y Oruro. La expectativa es ampliar acciones a otros departamentos donde la cultura de análisis, debate y diálogo en la sociedad civil es menos visible y un tanto débil en términos organizativos y de liderazgo.